El aprender Grafología es en primer lugar un descubrimiento personal, una apertura al mundo íntimo en que nos vemos enfrentados, a traer al presente gran información de nuestro pasado, desmenuzando para comprender y dar respuesta a un torbellino de interrogantes, todas muy valiosas. Una vez internalizado el proceso pasaremos por una etapa de introspección, asimilación y comprensión. Esto que comento es debido a la experiencia que día a día me aportan los alumnos y también mis vivencias.
Después de esta maravillosa experiencia, nos vamos a dirigir a observar a nuestro entorno más cercano, nuestros padres, hijos, esposos, amigos. Todo esto con el fin de ser mejores y superar aquellos obstáculos que se nos han presentado en el camino.
Más que un curso de Grafología es una invitación a entendernos y entender lo que siempre escrituramos sin mayor explicación y ahora darle un sentido a la forma particular de hacer y de ser.
Se debe entender la Grafología desde su inicio con los precursores, pasando por la comprensión del trazo sus variantes, gestos gráficos, el significado de la firma o rúbrica, un todo que constituye en qué somos únicos y no existe otra persona que escriture igual, es como nuestra huella dactilar.
Invito a disfrutar de la mano por este camino.
«La escritura es el relieve visible del pensamiento J.H. MICHON»